FRUTAS DEL BOSQUE

El poder protector de las pequeñas frutas del bosque hace muy recomendable su consumo habitual.

Ricas en vitamina C, hierro y taninos, las bayas silvestres, como las frambuesas, los arándanos, las moras, las grosellas o los madroños son un regalo para el paladar y la salud, especialmente para los niños, que son los que más disfrutan cuando pueden participar en vivo y en directo de su recolección en plena naturaleza. 

SON CAMPEONAS EN ANTIOXIDANTES

La capacidad de absorción de radicales de oxígeno (en inglés, oxygen radical absor- bance capacity, ORAC, me- dida en micromoles por cada 100 g) es un método de medición de la capacidad antioxidante de los alimentos en laboratorio.

Actualmente existe una discusión científica sobre si esta capacidad se da en la misma medida en el alimento ingerido, pero en cualquier caso indica la potencia antioxidante de los alimentos.

Las bayas aparecen en los primeros lugares de la clasificación: saúco (14.697), grosella negra (7.957), mora (5.905), arándano (5.481), frambuesa (5.065) y grosella roja (3.387).